Optimización y eficacia del trabajo: Ergonomía cognitiva
¿Existe alguna manera efectiva para optimizar nuestro entorno de trabajo?
La respuesta está en la Ergonomía Cognitiva y esta disciplina está enlazada con la Psicología y la Neurociencia.
Puede que no hayas oído hablar o haber leído este concepto en concreto, pero seguramente te resulte familiar la expresión “estar quemado por el trabajo”.
El burnout o “quemarse por el trabajo” es un síndrome cada vez más común en los trabajadores. Esto puede producirse por varias causas, entre ellas, una mala gestión de la ergonomía en el ambiente de trabajo. La Ergonomía Cognitiva nos ayuda a la hora de tener un ambiente laboral eficaz, práctico y seguro.
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¿En que se sustenta?
Su base es la Ergonomía, la ciencia que estudia las interacciones entre los humanos y el desempeño de su trabajo para garantizar calidad laboral (sea física, organizacional o cognitiva) y evolucionar positivamente las situaciones de trabajo.
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¿Qué analiza la Ergonomía Cognitiva?
Este tipo de Ergonomía analiza los procesos básicos psicológicos cómo:
- Percepción: engloba desde la percepción visual, incluyendo en ella el color, tamaño, movimiento y profundidad hasta términos más generales cómo patrones y formas. También tiene en cuenta la precisión en la cual desempeñamos el trabajo.
- Atención: analiza la selección atencional, vigilancia y fatiga mental a la hora de desempeñar tareas.
- Aprendizaje: trabaja sobre el condicionamiento (clásico, operante, instrumental…) y las maneras que tenemos de aprender (Aprendizaje vicario, predictivo…).
- Memoria: analiza la memoria a corto y a largo plazo, procesos de recuperación y olvido, memoria prospectiva…
- Motivación: tiene en cuenta la manera de conseguir logros, reconocimientos, aceptar responsabilidades y obtener incentivos.
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¿Qué riesgos psicosociales relacionados en el ámbito laboral trabaja la Ergonomía Cognitiva?
Su objetivo es reducir riesgos laborales y mejorar la calidad del trabajo y así tratar de evitar que se produzca un error de factor humano. La Ergonomía Cognitiva también trata de diseñar máquinas intuitivas y fáciles de manejar para que una mala interacción/percepción no se convierta en un fallo de gran envergadura.
En resumen, gracias al gran trabajo de la Ergonomía Cognitiva podemos disfrutar de una mayor calidad laboral. Debido a ser un tema importante y siempre actualizable, cada vez y con más facilidad, trabajamos en ambientes mejor adaptados a nuestro trabajo y con maquinaria intuitiva e inteligente.
