¿Cómo puedo manejar la baja tolerancia a la frustración?

 

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¿Qué es la frustración?

“No puedo más”, “No merece la pena volverlo a intentar”, “No valgo para esto, voy a abandonar”, “He fracasado” ¿Te resultan familiares estas frases? Es muy probable que a lo largo de tu vida te hayas enfrentado a ciertos obstáculos o situaciones donde te haya resultado complicado lograr cumplir con el objetivo o meta establecida. Es ahí donde nos invade una emoción un tanto desagradable, una emoción que viene acompañada de sentimientos de enfado, irritabilidad, decepción… A esta emoción, la conocemos como frustración, y pese a que no resulta agradable lidiar con ella, es una respuesta totalmente natural.

Sin embargo, es importante que pese a sentirla en ocasiones, sepamos gestionarla de manera óptima para que no nos afecte de forma negativa en nuestras vidas.

 

¿Qué efectos tiene en ti la baja tolerancia a la frustración?

Como comentábamos en el apartado anterior, la baja tolerancia a la frustración trae consigo una serie de síntomas o consecuencias que nos pueden llegar a repercutir de manera negativa en nuestro bienestar diario. A continuación, podrás observarlos.

 

Estrategias para aumentar la tolerancia a la frustración

Para lograr mejorar tu tolerancia a la frustración, te propongo algunas estrategias que pueden servirte de ayuda.

  1. Establece metas realistas. Trata de no pecar en ser demasiado perfeccionista y no establezcas objetivos inalcanzables. Todo comienzo o proyecto lleva su proceso y su tiempo, recuerda, antes de correr, aprendiste a andar, y es probable que te cayeses en múltiples ocasiones antes de lograrlo.
  2. Mantén un diálogo positivo interno. Cómo te hablas a ti mismo, tiene un impacto muy fuerte en tu autoestima. No sirve de nada ser demasiado autocrítico contigo mismo. Sé compasivo y conviértete en tu aliado, no en tu enemigo.
  3. Gestiona las emociones de la ira y enfado. Aprende a identificar, autorregular y reestructurar tus emociones para no tomar decisiones precipitadas ni echar a perder el trabajo realizado.
  4. Pon en práctica la resiliencia. Desarrolla la habilidad de adaptarte y recuperarte de situaciones difíciles. Reestructura tus pensamientos y recursos en función de las circunstancias. Haz uso de aquellas situaciones complejas como si de un reto se tratasen. Acepta dichos obstáculos y aprende de ellos, esto te ayudará a incrementar tu potencial y crecer.
  5. No huyas de la frustración. Como comentábamos antes, pese a ser una emoción desagradable, es normal sentirla. Evitarla solo reforzará aquellos pensamientos que nos dicen que no valíamos para ello o que nos demos por vencidos.
  6. Busca ayuda. En ocasiones, tener la perspectiva de otra persona puede ayudar a procesar tus sentimientos de frustración.

 

 

A continuación, te adjunto un video de un cuento que ilustra muy bien el tema tratado sobre las emociones y la frustración. CUENTOS QUE VAN Y VIENEN. (2022, 6 junio). OTTO – UN CUENTO SOBRE FRUSTRACION y EMOCIONES [Vídeo]. https://youtu.be/Gi4de8UBpo4?feature=shared

 

¡Un saludo!

Almudena P.L